La fachada neoclásica y la lujosa decoración del Four Seasons Hotel des Bergues insinúan una historia que se remonta a 1834, pero su perspectiva es decididamente moderna.

Una ubicación incomparable a orillas del lago de Ginebra ofrece vistas de los Alpes, el casco antiguo y, por supuesto, el lago. El distrito financiero está a solo minutos de distancia. Diseñadas por Pierre Yves Rochon, las habitaciones clásicas en la planta baja con antigüedades y suelos de mármol y contemporáneas en la planta superior, se encuentran entre las más bonitas de la ciudad. Encontrará más formas de darse un capricho en el spa Mont Blanc en la azotea, donde una piscina infinita con una vista magnífica, una sauna y un hammam prometen rejuvenecimiento. También hay salas de tratamiento, espaciosas y decoradas en suaves tonos neutros para brindar una experiencia de relajación completa. mientras que la biblioteca del spa es el lugar para relajarse con un libro (o una comida ligera) junto a una acogedora chimenea.